jueves, 14 de mayo de 2015

André Martínez de León




Andrés Martínez de León, nació el 5 de abril de 1895 en Coria del Río (Sevilla en el seno de una familia humilde. Con apenas un año, la familia se traslada a una Huerta en Los Remedios (Sevilla), donde su padre trabaja como capataz. Junto a esta huerta, en los salones del conocido Convento de los Remedios, los pintores, Gonzalo Bilbao, Ignacio Zuloaga y Marín Castellanos, tienen instalado su estudio, el pequeño Andrés no pierde ojo viendo como estos maestros, ejecutan sus trabajos, este lugar lo frecuenta casi a diario. Años más tarde su familia fija su residencia en la calle Pureza nº 113. Andrés se matricula en la Escuela de Artes y Oficios y Bellas Artes, ubicada en la Plaza del Museo de Sevilla, destacando en las disciplinas de Dibujo del Antiguo y del Natural, adquiriendo gran dominio del lápiz y la pluma.

En el año 1915, Andrés Martínez de León, expone por primera vez en Sevilla, concretamente en Casa Gil, tienda especialista en lienzos, molduras y colores. Este mismo año publica su primera ilustración, en la revista “Sevilla y Sus Fiestas de Primavera”, donde repetiría al siguiente año.

Desde 1916 hasta 1930, Martínez de León, participa en las exposiciones de primavera, organizadas  por la Sección de Bellas Artes del Ateneo de Sevilla y el Ayuntamiento de la ciudad.

En 1918 comienza a colaborar en la prensa nacional y local. Es en ''El Noticiero Sevillano'', donde publica  por primera vez su popular viñeta del personaje satírico de “Oselito”.



En los años veinte, cuando comienza su consolidación como ilustrador y viñetista,  con una serie de colaboraciones en distintos periódicos: “El Liberal”, “El Correo de Andalucía”, “El Noticiero Sevillano” “La Unión”, y “ABC”, “El Debate”; “Heraldo de Madrid”, “La Voz” y “El Sol”, donde trabaja permanentemente desde  1922, con una serie de viñetas diarias, ambientadas en escenas típicas sevillanas.

En el año 1926 Martínez de León publica su primer libro, siendo autor tanto de los textos como de las ilustraciones, “Historietas Sevillanas”, con prologo de José Más. En 1931, dado el éxito de su primera obra Historietas Sevillanas, repite formato de las viñetas y tamaño de la publicación, se publica “Los Amigos de Toro o la Parte Sana de la Afición, Reglamento Taurino en XXX Capítulos”. Textos e ilustraciones de Andrés Martínez de León, Prologo de  Gregorio Corrochano.

En el año 1931 siguiendo instrucciones de Blas Infante, Andrés Martínez de León, realiza el dibujo del primer Escudo Heráldico de Andalucía, que actualmente está expuesto en la Casa Museo del Padre de la Patria Andaluza.

A lo largo de su  vida artística ilustra infinidad de obras para importantes escritores españoles: Juan Rodríguez Mateos,  Manuel Martínez de León, José Andrés Vázquez, Salvador Valverde, Emilio Gutiérrez-Gamero, Benito Mas y Prat, Manuel Chaves Nogales, Rogelio Pérez Olivares, José Muñóz San Román, José Mas, Pedro Garfias, Gregorio Corrochano, Blas Infante, Alejandro Pérez Lugin, Armando Palacios Valdés, Salvador Fernández Álvarez, Manuel Martínez Remis, Luis Bollaín, José Manuel Caballero Bonald, Edmundo González Acebal,  José María de Cossío, Guillermo Buenestado León.

En el invierno de 1935, Viaja a la Unión Soviética como enviado especial del diario madrileño, “La Voz”, para asistir a la celebración del XXXIII aniversario de la revolución rusa. Fruto de aquel viaje escribe e ilustra la obra "Oselito en Rusia", publicándose en las páginas de este diario madrileño. Ante  la magnífica acogida de la obra por sus lectores,  en el año 1936  lo edita la Editorial Pueyo de Madrid.

El día 18 de julio de 1936, estalla la Guerra Civil, Andrés permanece en Madrid unos meses, trabajando para la prensa de Madrid, en las secciones de toros, los deportes, e ilustrando con sus viñetas, los diarios “La Voz” y “El Sol”, para los que trabaja casi en exclusiva. A medida que avanza la guerra civil disminuye su tirada  y contenido cada día, su colaboración por tanto, es menor cuanto más avanzada la guerra, agotando Martínez de León sus recursos económicos y decide buscar un lugar seguro para su familia, abandona Madrid para afincarse en las proximidades  del Balneario de Jabalcuz (Jaén). En estas fechas Martínez de León, colabora en el periódico del bando republicano “Frente Sur”, donde conoce entre otros Pasionaria, Herrera Petere, Miguel Hernández y Pedro Garfias.

A medida que avanza la Guerra Civil, la influencia de sus contactos con intelectuales de izquierda, radicaliza sus trabajos. Meses más tarde se afinca en Castuera (Badajoz), en compañía de toda su familia. En esta población extremeña permanece los meses mayo, junio y julio de 1937, colaborado  junto con otros intelectuales  con el periódico “Frente  Extremeño”, con sus artículos e historietas.

Ante el asedio de las tropas sublevadas, Martínez de León intenta proteger a su mujer e hijos, y viaja hasta Valencia para afincarse en esta ciudad, que en ese momento mantiene su lealtad a la legalidad republicana. En esta ciudad colabora con los periódicos de izquierdas “Frente Rojo” y “Vanguardia”, órganos del Comisariado del Ejército de Levante y  realiza en el mes de octubre de 1938, la historieta “Oselito Extranjero en su Tierra”. Para Ediciones Solidaridad realiza una colección de 12 dibujos con una fuerza y un expresionismo propios del dibujante coriano, denunciando el horror de la contienda. Entre los años (1937-1939), Andrés Martínez de León realizó tres carteles para el Bando Republicano y como protagonista el Miliciano “Oselito”.

En efecto Martínez de León, que hasta el momento no había manifestado tendencia política ninguna, de hecho ni antes ni durante la contienda se afilió a partido político alguno. Debido al profundo sentimiento de libertad que vive en el alma de todo creador artístico, como otros tantos intelectuales de la época, puso sus lápices, sus pinceles y su ingenio del lado del Bando Republicano, poniéndolos al servicio de la legitimidad democrática;  ilustrando con sus dibujos las páginas de la prensa editada por el Bando Republicano.

El día  1 de abril de 1939, se da por concluida la Guerra Civil. Meses más tarde Andrés junto a su familia regresan a Madrid preocupado por el estado en el que se encontrará su domicilio tras los efectos de la cruenta guerra civil. El día 8  de noviembre de 1939, irrumpen en su domicilio la Brigada Político-Social de la Dirección General de Seguridad, lo detienen  y es acusado de: -iniciar una campaña en periódicos de Madrid y provincias, ofensiva para la Causa Nacional-. Una vez celebrado el Consejo de Guerra el 2 de octubre de 1941, es acusado de un delito de adhesión a la Rebelión Militar. Siendo condenado a la pena de muerte; conmutada el 2 de octubre de 1942, a 20 años y un día de reclusión mayor.

En la soledad de su celda realiza una serie de dibujos que su mujer Ana Alberdi, los saca clandestinamente de la cárcel y se  los envía para su venta, a casa del fotógrafo Juan José Serrano en Sevilla, gran amigo de Andrés y de la familia. Así mismo alquila habitaciones de su domicilio en la calle Alcalá, pero la fuerza gubernativa se lo prohíbe, estos pocos ingresos hacían que tanto su mujer y sus tres hijos, pudieran subsistir en aquellos años extremadamente difíciles de hambre, de tristeza y pobreza. Ana Alberdi se encontraba sola con sus hijos en el Madrid de la posguerra, ya que toda la familia estaba establecida en Sevilla.

Andrés Martínez de León, es indultado el 28 de diciembre de 1946. Recuperada su libertad, inmediatamente visita en Sevilla a su gran amigo Juan José Serrano, que durante estos años de cautiverio, se ha preocupado de echarle una mano a su familia, vendiendo los dibujos que en la soledad de su celda Andrés realizaba.

Retoma Andrés sus relaciones con la vida social, artística y cultural de Madrid y Sevilla de la posguerra. En el año 1947, ilustra para Manolo Caracol y Lola Flores el cartel del espectáculo “Zambra” ; el cartel de la película “Embrujo”, bajo la dirección de Carlos Serrano de Osma y Realiza un gran retrato para la artista jerezana.

Así mismo Andrés Martínez de León, diseña y pinta para “Cerámicas El Carmen” de Triana, su barrio de infancia y juventud, una serie de murales cerámicos para la Plaza del Rocío de Coria del Río,  su pueblo natal. Como hizo en su momento para los murales de la Plaza de España en Sevilla.

En los años cincuenta comienza una larga colaboración con el periódico “Diario España” editado en Tánger, que dirige su amigo Gregorio Corrochano, y en la revista de humor “Don José”.

En 1954  Ediciones Aguilar publica “Los Amigos del Toro, El Toreo, sus Males y su Remedio por “Oselito”. Textos e ilustraciones de Andrés Martínez de León.

17 de julio de 1957: El Real Betis Balompié, nombra a Andrés Martínez de León, “Socio de Honor del Club”, un año más tarde ilustra y narra la “Historia del Real Betis Balompié”, que se publica con motivo del cincuentenario de la fundación de este equipo sevillano. Martínez de León pone en boca de “Oselito”,  el famoso grito de guerra bético  “VIVA ER BETI, MANQUEPIERDA”. Nace dicha frase del ingenio de Martínez de León, consiguiendo acrisolar todos los valores y sentimientos de su alma bética, y con ello de toda una afición, llegando dicho legado hasta nuestros días.

Entre 1958 y 1978, época en que alejado en parte del periodismo y las viñetas en tinta china se centra en la pintura al óleo de gran formato y muy expresiva en colores, con una pincelada muy personal, de trazo muy grueso, que descompone la luz e imprime un aire impresionista al cuadro, que obliga al espectador a retirarse unos metros del lienzo para enfocar mejor su visión.

Expone en distintos países americanos, Perú, Argentina, Colombia, Venezuela y sobre todo México. Fue su época más creativa y más productiva desde el punto de vista artístico. Trata sobre todo temas taurinos, paisajes andaluces, entornos costumbristas en calles y plazas, y retratos familiares.

Desde el año 1968 hasta 1975, expone cada primavera en la sede del Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla, ciudad en la que pasa cada año desde la Semana Santa, hasta después de la Feria de abril. Recordando en estos días su infancia y juventud con el encuentro de entrañables amigos, que como una tradición, mantienen esta cita en el estío primaveral. 

1976, Martínez de León ilustra su última obra en vida para el poeta costumbrista, Guillermo Buenestado León, “Venus Andaluza”.

Desde principios de los años 60 hasta 1977, ilustra el cartel de la Feria de Coria del Río. Este último cartel Andrés ya se encontraba gravemente enfermo, pero para no faltar a la cita con la Feria y Fiestas de su pueblo natal, envía una pintura que en el año 1948, se utilizó como portada de la obra  poética de su hermano Manuel “Romances del Sur”.

La muerte le sorprendió en Madrid el 25 de mayo de 1978, a los 83 años. Tras su muerte, se suceden varios homenajes, en Madrid, Sevilla y su pueblo natal Coria del Río, al que fue pionero en la historieta andaluza, gran dibujante, pintor, ilustrador y mejor persona.

sábado, 2 de mayo de 2015

Ortiz de Zúñiga



Diego Ortiz de Zúñiga (Sevilla, 1.633 – Sevilla, 1.680), noble e historiador de la ciudad de Sevilla.

De noble estirpe, Diego era hijo de Juan Ortiz de Zúñiga y Avellaneda, Caballero de la Orden de Calatrava, Capitán de Infantería, que sirvió en la frontera de Portugal desde 1.643 a 1.649, y de Leonor Luisa del Alcázar y Zúñiga.

Fue investido con el hábito de la orden de Santiago a los siete años de edad y nombrado Caballero Veinticuatro de Sevilla a los veinte.

Diego Ortiz de Zúñiga se casó en 1.657 con Ana María Caballero de Cabrera, hija de don Diego Caballero de Cabrera, Caballero Veinticuatro de Sevilla y Caballero de la Orden de Santiago. Al primer hijo de Diego, Juan Ortiz de Zúñiga, le fue concedido en el año 1.705 el título de I marqués de Montefuerte.

Por encargo del pariente mayor de la Casa de los Ortizes de Sevilla, Alonso Ortiz de Zúñiga, II marqués de Valencina, Diego realizó una obra genealógica de su linaje titulada “Discurso Genealógico de los Ortizes de Sevilla”.

Sin embargo, la obra que le ha dado inmortal memoria es “Anales Eclesiásticos y Seculares de la muy Noble y muy Leal Ciudad de Sevilla, Metrópoli de Andalucía, de la que contiene sus más principales memorias desde el año de 1.246 hasta el año de 1.671”.

Este libro, editado por Juan García Infanzón en la Imprenta Real de Madrid en 1.677, se lo dedicó Ortiz de Zúñiga a Juan Francisco de la Cerda, duque de Medinaceli, Adelantado Mayor de Andalucía, Notario Mayor de Andalucía, Alaguacil Mayor de Sevilla y descendiente del rey Fernando III.

En 1.796, Antonio María Espinosa y Cárcel, publicaba en Madrid una segunda edición dividida en cinco volúmenes, añadiendo los anales hasta el año 1.700.
También escribió, e hizo imprimir, “Posterioridad de Juan de Céspedes, Trece y Comendador del Monasterio en la Orden de Santiago”. Diego no consiguió acabar por completo esta última obra.

Ortiz de Zúñiga falleció a la edad de 44 años y está enterrado, por deseo expreso, bajo el altar de la Divina Enfermera en la iglesia de San Martín de Sevilla, donde también fue bautizado.

Diego Ortiz de Zúñiga está inmortalizado en una de las figuras de los doce sevillanos ilustres en el Palacio de San Telmo de Sevilla (aunque no todos nacieron en Sevilla), obra del admirable escultor Antonio Susillo, que realizó por encargo del Duque de Montpensier, cobrando la cantidad de 30.000 pesetas